Hablemos de I+D

Gemma San Cornelio: «La digitalización nos ha empoderado como creadores audiovisuales»

Entrevista a la investigadora del grupo de investigación de comunicación y cultural digital MEDIACCIONS

¿Cuál es tu formación académica?

Soy licenciada en Bellas Artes por la Universidad Politécnica de Valencia. Me especialicé en tres grandes ámbitos: el audiovisual, el del diseño y finalmente una línea de arte conceptual, que es el tema de mi producción artística, relacionada con cuestiones de identidad y género. El último año de facultad lo cursé en la Universidad Nacional de Australia con una beca de la universidad. También estuve en el Departamento de Fotomedia de la Escuela de Arte de Canberra, donde, además de ampliar conocimientos sobre fotografía, vídeo y audiovisual, llevábamos a cabo una especialidad que ellos denominaban interactive multimedia y que consistía en crear webs, CD-ROM..., cosas de los años noventa que me introdujeron en el mundo del arte y la comunicación digital. Luego fui becaria en el Departamento de Comunicación Audiovisual, Documentación e Historia del Arte de la Facultad de Bellas Artes. Hice el doctorado combinando becas diferentes de investigación con proyectos aplicados, en temas de diseño, y también un posgrado de Comunicación Digital. En aquellos años combinaba la práctica artística, el diseño y la investigación con alguno de los temas que más adelante he ido desarrollando en mi investigación. El doctorado formaba parte del programa de Comunicación Audiovisual y tenía contenidos de comunicación en sus diferentes ramas; la tesis la realicé mezclando temas de arte y comunicación digital centrados en la representación y la identidad. En los años noventa varias teorías hablaban de la identidad como máscara, de cómo podías ser otra persona en internet, cuando internet era textual. Por otro lado, había una serie de teorías relacionadas con el arte, teorías contemporáneas que experimentaban con las diferentes identidades. A partir de ahí realicé una propuesta muy interdisciplinaria bastante ecléctica sobre mi tesis.

¿Cuál es tu trayectoria en la UOC?

Soy profesora de los Estudios de Ciencias de la Información y de la Comunicación de la UOC, concretamente del grado de Comunicación y del de Diseño y Creación Digitales. Mi especialidad son los temas relacionados con la creatividad, la estética, la cultura visual... es decir, las asignaturas que forman parte de un terreno más creativo.

Pertenezco a MEDIACCIONS, un grupo de investigación interdisciplinario que incluye profesores investigadores de los Estudios de Ciencias de la Información y de la Comunicación y de los Estudios de Artes y Humanidades. Elisenda Ardèvol es su investigadora principal. Trabajamos en el ámbito de la cultura digital y hemos ido creando diferentes proyectos a lo largo de todos estos años.

Entre los últimos proyectos que hemos desarrollado con el grupo de investigación destacaría SelfieStories y personal data, que fue financiado por la Fundación BBVA y concluyó hace casi un año. De todos modos, todavía explotamos los resultados obtenidos, ya que acumulamos una gran cantidad de datos, algunos cuantitativos, a partir de la extracción de datos de la aplicación Instagram, y otros procedentes del trabajo de campo etnográfico. Hicimos una experimentación metodológica con los métodos mixtos a fin de averiguar las narrativas personales mediante la autofoto (selfie) como recurso.

Más recientemente hemos terminado un proyecto llamado Cazadores de historias del futuro, financiado por el Ayuntamiento de Barcelona. Su investigador principal es Toni Roig. En este proyecto planteamos la creación de un juego de mesa para generar historias orientadas al futuro, utilizar la narrativa y la narración de historias (storytelling) como herramienta creativa para especular sobre el futuro. Este juego lo pusimos en práctica en varias escuelas de Barcelona y lo presentaremos en la Fiesta de la Ciencia. La idea de especular sobre el futuro era el tema principal del otro proyecto que también se ha terminado, D-Future: Prácticas de futuro: espacios de creación digital e innovación social, financiado por el Ministerio de Economía, Industria y Competitividad, y centrado en la narrativa. También hay otras dimensiones de cómo pensamos en el futuro mediante la tecnología y otros estudios de casos que han realizado compañeros del grupo.

¿Hacemos autofotos por narcisismo?

La idea del narcisismo es uno de los tópicos de los que queríamos huir en este proyecto. Por una parte, nadie ha demostrado con datos que esto sea así y, por otra, no pertenece a nuestro ámbito. Esto, en cualquier caso, que lo defiendan los psicólogos, porque no es lo que nosotros buscábamos con el proyecto. Queríamos estudiar las diferentes apropiaciones de la autofoto o cómo la autofoto se inscribe dentro de una narrativa personal, porque en realidad la autofoto no funciona por sí misma, solo es una pieza. Ni es tan abundante como pensamos, porque al realizar un análisis cuantitativo no han salido tantas, ni es tan relevante. Es relevante en algunos momentos concretos, en los que la gente decide que debe hacer una autofoto. Tiene mucho que ver con la idea de grabar un momento que es significativo, se trata de una de las funciones de la fotografía de toda la vida. Los jóvenes hacen más autofotos y algunos estudios han determinado que también las hacen más las mujeres que los hombres, pero esto no lo hemos encontrado con nuestros datos. Hay un discurso relacionado, y no demostrado, que vincula la autofoto con la idea de la superficialidad, de la banalidad, del narcisismo.

Con la tecnología actual, ¿todos somos creadores audiovisuales?

Sí, eso también lo trabajamos, sobre todo en proyectos anteriores: la creatividad colectiva o la creatividad de los usuarios del día a día, la creatividad cotidiana. Se produce una especie de empoderamiento, un cierto dominio de las herramientas tecnológicas que sirven para grabar, un dominio de la imagen. En las redes sociales, por ejemplo en Instagram, se puede ver que hay un nivel importante de calidad visual en las imágenes, y hemos ido evolucionando hacia aquí.

¿Qué libros nos recomendarías de tu ámbito?

Uno de los libros que recomiendo es La estetización del mundo, de Gilles Lipovetsky y Jean Serroy, que habla de cómo vivimos en un mundo en el que la imagen estética es muy importante. Tiene una perspectiva crítica, pero también provocativa. Los autores plantean que el capitalismo, caracterizado por haberlo hecho todo «feo», tal vez ha aportado algo bueno: poner en primer término la experiencia estética, por ejemplo. Ellos usan el concepto de transestética, que no solo pertenece al arte, sino que atraviesa diferentes esferas de la producción cultural. El libro habla de diseño, de arquitectura, de moda y de cómo todo esto ha ido configurando de alguna manera un gusto por las cosas bonitas.

Otro libro que recomiendo se titula The invention of creativity, de Andreas Reckwitz, que vincula esta obsesión de la estética con la creatividad. Nos interesa mucho que todo sea bonito, y esta novedad es lo que hace que la creatividad se haya convertido en algo tan importante en los ámbitos social e institucional. Este trabajo, más sociológico, también pone de manifiesto otras cuestiones relacionadas con la creatividad, como el trabajo creativo, la precariedad y cómo las concepciones de la creatividad como algo vinculado al disfrute personal hacen que al final aceptemos condiciones precarias simplemente por el hecho de llevar a cabo una actividad que nos gusta; de algún modo, tiene esta contrapartida.

Estos libros me parecen interesantes porque reúnen todas las obsesiones que hemos ido trabajando.